C
ercano a la piscina, con vistas a las mejores puestas de sol o para un baño de luna y estrellas, el clima del Cabo de Gata permite darse estos placeres únicos, y siempre con la suficiente privacidad. El jacuzzi tiene igualmente el agua tratada ecológicamente, con capacidad para cuatro personas, rodeado de tarima te teca, tumbonas, sombrillas de brezo y una ducha al aire libre en una pequeña gruta. Dispone de mini-bar.